martes, 6 de marzo de 2012

El Encuentro

Era temprano, baje los escalones que me separaban del lobby de aquel hotel caraqueño que me alojaba, los pájaros en el jardín cantaban a la alegre mañana, entrecruce miradas con algunos huéspedes que se dirigían al comedor, busque en el Lobby , no había casi nadie a esa hora, vi un hombre sentado en una de las butacas , 50 años y más con barba y anteojos, me dije este debe ser el que me espera, después de todo era el único en aquel salón, con esa seguridad avance hacia él , el caballero se puso de pie, le extendí la mano con mi nombre y el correspondió con apretón firme y mirada serena y penetrante.
El dialogo comenzó, yo había sido enviada por el Centro Cardiovascular ASCARDIO para conocer las necesidades y posible asesoramiento conductual al personal del Centro de Errores Innatos del Metabolismo del Instituto de Estudios Avanzados, ante mí su creador y Director. Yo ya tenía un esbozo del taller que ofrecería, con alegría vi que mis ideas podrían satisfacer las expectativas del científico, acepte el compromiso con la intención de ayudar al que unos minutos antes, vestía el traje de un extraño.
La actividad se cumplió en el día señalado, los resultados los ignoro, pero lo que si pude conocer es que hay momentos memorables en la vida de las personas, para mí el conocer a este artista prestado a la ciencia fue uno de ellos, desde ese día hubo muchos momentos compartidos con él y su amada Josefina , largas conversaciones fueron descubriendo al guardián de la familia, al médico que quiso estudiar medicina por que “Yo pensaba que sería muy lindo que un día cuando yo entrara a las casas de la gente se tranquilizaran”, después quiso conocer las profundidades de la mente humana y se sumergió hasta llegar a la neurona, para más tarde poner al servicio de la
comunidad sus conocimientos científicos y hacer a muchos padres felices.
Otras veces se iba por esos caminos de la mano de los baqueanos con su mochila, sus binoculares,cuaderno y lápiz y regresaba cargado de historias de vidas sencillas y buenas y al final vi como la ciencia se le escurría por los dedos y se convertía en obras de arte.
Doctor Jorge Matias Villegas Polanco ahora en el otoño de su vida, como usted ha finalizado el relato de su vida, siéntese junto a su familia a saborear esos frutos que usted ha cultivado en esa vida maravillosa.
Gracias por formar parte de mi historia

5 comentarios:

Franklin Padilla dijo...

Gracias por compartir la vivencia de ese encuentro. No conozco la persona ni la obra del Dr. Villegas (¿es el mismo Dr. Villegas Polanco?)pero por tu descripción se vislumbra un ser excepcional.}Un cordial saludo

milexa reyes dijo...

Que bello recordar esos momentos que nos marcan para siempre, como es conocer a las personas que pasaran a ser parte de nuestra historia, una bellisima historia.....,

milexa reyes dijo...

Bellisimo ese encuentro....sobre todo reconocer que nos entrelazamos con personas a las cuales quedaremos unidas por haber compartido ideas, compromisos que somos gratos de tomarlos..
Mi agradecimiento personal a ese grande ideador....

Colchagua dijo...

Maritza, has colocado en unas breves palabras, un torrente de genuinos sentimientos, que solo pudiste narrarlos con el corazón, para presentarnos con admiración a un ser profundamente humano...como el Dr.Villegas. Gracias

Anónimo dijo...

Maritza no tengo palabras para describir lo que sentí al leer este emotivo relato. Se como lo admiras desde su plano humano hasta lo cientifico. Gracias por compatirla.
Un gran abrazo. TQM